Origen: Nueva York.
Periodo: 1977 - 2002.
Su primer disco es una rayada interesante, es como escuchar a un Elvis espasmódico y lleno de tics, con un compi muy enajenado a los mandos de una cutre caja de ritmos. El que cometía los gruñidos se llamaba Alan Vega, y el del sinte infame, Martin Rev.
Las vocales de Alan Vega recuerdan al primer Iggy Pop y su timbre es un híbrido entre Billy Idol y Roy Orbison.
Un dúo de locos que, no obstante, calaron hondo en la escena musical de los ´70 y ´80 en los círculos más underground. Si hay que ponerles una etiqueta musical, sería la de un proto-punk electrónico minimalista con remiscencias rockabilly. Si se les escucha a conciencia el caso es que los tíos molan bastante. También es cierto que debes disponer en tu arsenal auditivo una buena dosis de tolerancia ecléctica, porque si no esto no te va a sonar muy bien.
Ya lo veo venir, muchos listillos dirán a bote pronto que esto que hacía Suicide lo podrían hacer ellos mismos con su órgano Casio. Y yo les diría que no, que ni lo intenten. Tiene personalidad y mucho carácter, amén de contar con un bagaje interesante estilístico de base.
A todas luces, un dúo a recuperar.
A destacar:
> Las Vegas Man - Shadazz (1980).
> Wild in blue - Surrender (1988).
> Universe - Why be blue? (1992).
> Misery train - American mean ( 2002).
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