El gran Sly Stone (Sylvester Stewart), un genial personaje multinstrumentalista, a la altura de James Brown.
James Brown podrá ser el padrino del soul, pero en lo que respecta al funk, Sly se lleva la medalla de oro. JB la de plata.
Con su banda consiguieron ser apoteósicos entre 1967 y 1973.
Más allá de eso Sly revirtió en solitario y poco después comenzó a hacer mella en él su adicción a las drogas. No obstante, mantuvo el tipo durante bastantes años.
Actualmente, ya desfondado, vive en una simple caravana después de haber probado las más exclusivas mieles del éxito y del lujo. Una auténtica lástima.
Sly no supo gestionar adecuadamente su volcán, pero es sin duda una figura impertérrita que debemos aquí subrayar, pues, sinceramente, muy pocos lograron lo que consiguió.
En sus primeros discos encontramos no obstante algunas otras joyas supremas, a saber:
"Underdog"; "If this room could talk" y "Trip to your heart" (1967); "Pressure" (1968); "Stand!" (1969) y "(You caught me´) smilin´" (1971).
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